CIPCA Notas

Derechos de las mujeres rurales, entre avances y desafíos

Derechos de las mujeres rurales, entre avances y desafíos

Autor: Coraly Salazar Carrasco - Responsable Unidad de Acción Política de CIPCA
Fecha: 15/03/2019

Este 8 de marzo, como cada año, se recordó el Día Internacional de la Mujer en conmemoración a la lucha de las mujeres por sus derechos, que lleva ya más de un siglo. En este marco es importante destacar la lucha de las mujeres rurales, cuya situación de vulneración de derechos se incrementa además por su condición étnica y las circunstancias de mayor pobreza características de las zonas rurales de los países en vías de desarrollo, como Bolivia.

Pese a los avances en las normas estatales con las que contamos en el país las mujeres del área rural no tienen total acceso a los recursos naturales en sus propios territorios, ni al agua o a la participación política, lastimosamente los esfuerzos realizados todavía son insuficientes. Tampoco se reconoce el aporte de las mujeres rurales al desarrollo del país, siendo ellas el motor principal de la economía.

De acuerdo a dos estudios realizados por el CIPCA; uno sobre los Ingresos Familiares Anuales (IFA) de campesinos e indígenas, y otro sobre el aporte de las mujeres rurales a la economía, son ellas las que con su trabajo aportan al 43,7% de los ingresos de sus familias, en distintos contextos y de diversas formas, siendo este aporte muchas veces no reconocido y más bien invisibilizado por los varones, al considerarlo como una “ayuda” al trabajo que ellos realizan sobre todo en la producción agropecuaria forestal en el área rural.

 En el estudio del aporte económico de las mujeres se evidencia que existen rubros productivos adoptados casi de forma exclusiva por las mujeres por ser ellas las que realizan todas las actividades referentes por ejemplo en la producción de hortalizas y la producción lechera desde el cuidado y pastoreo del ganado hasta la transformación de la leche en queso, aunque en algunas zonas existen actividades compartidas con los varones, pero ellos mismos reconocen esos rubros como propios de las mujeres. Pero ello no quita que las mujeres también participen en algunos momentos de los procesos productivos de otros rubros, como en la siembra o la cosecha. En los últimos años, es más notoria la participación de las mujeres en tareas de mantenimiento de los cultivos, como son los cítricos y el cacao en la Amazonía, o en la recolección y transformación de la miel en el Chaco, por lo que la asistencia técnica también debe contemplar ahora las necesidades de las mujeres para poder mejorar sus capacidades productivas, facilitarles esa participación y capacitación, lo que es una tarea pendiente. Como la inversión en tecnología adecuada para que ellas puedan utilizarla y así se reduzca en algo el tiempo de trabajo que emplean en sus tareas productivas.

Uno de los datos de la investigación del IFA referente a la migración, evidencia que las mujeres rurales también forman parte de la población que sale de sus hogares en busca, principalmente, de otras fuentes de ingresos, fuera de sus predios productivos, del total de personas que migró durante el periodo 2016-2017, 35% eran mujeres, que fueron a emplearse de forma temporal generalmente en el sector de servicios.

En 1995, la Cuarta Conferencia de la Mujer subrayó la importancia del trabajo de las mujeres rurales y su aporte económico a través del trabajo remunerado en lugares de trabajo, y en el trabajo no remunerado en el hogar y la comunidad. Asimismo, quedó planteada la lenta incorporación de las mujeres al trabajo remunerado y la desigual distribución del trabajo remunerado y no remunerado entre hombres y mujeres. Al revisar los resultados de la encuesta del uso del tiempo aplicada a algunas de las familias de la cobertura del trabajo de CIPCA para el estudio del aporte de las mujeres a la economía, se evidenció que las mujeres no solo se dedican al trabajo doméstico o del cuidado, sino que también aportan al trabajo productivo, pero, además demostró que son ellas las que garantizan la reproducción de la fuerza de trabajo, y en muchos casos sin poder acceder a trabajos remunerados como el varón.

La presencia de las mujeres en las unidades productivas con su mano de obra es importante cuantitativamente y en rendimientos, aunque todavía no se cuenta con datos a nivel nacional, cada vez más se viene reconociendo su importante aporte en la producción alimentaria, en la preservación de la biodiversidad, en la reproducción de saberes y tecnologías ancestrales de orientación productiva. El reconocimiento de estas cualidades debe conducir a propuestas de políticas que asignen a las mujeres, a partir de su rol actual, su potencial papel en la producción alimentaria con su aporte sustantivo en la seguridad y soberanía alimentaria que potencie a las mujeres rurales en su rol de productoras a través de la mejora de sus condiciones de trabajo, la capacitación y el acceso a tecnología que mejoren las condiciones actuales de su trabajo, disminuyendo los riesgos a las que están expuestas por el trabajo precario que realizan, e impulsando procesos de transformación, con producción de mayor valor agregado, acompañadas de políticas de inversión en el sector.

Por esto, es necesario continuar profundizando en el conocimiento sobre el aporte económico de las mujeres rurales, principalmente a la agricultura familiar, a la producción y a la economía. 

Se necesita desarrollar agendas a corto y largo plazo que tengan en cuenta seriamente la incorporación de la perspectiva de género, ya que las personas más afectadas son las mujeres, los niños y los pobres. Además, se requiere un enfoque integrado y asentado en los derechos, y promover la creación de sinergias positivas entre entidades públicas y privadas. También se debe generar información económica y productiva desagregada por sexo en cada región.

Por último, el gobierno en todos sus niveles debe implementar políticas y dirigir la inversión pública a proyectos liderados por mujeres, como innovaciones tecnológicas que les reduzcan el tiempo de trabajo.

Otros CIPCA Notas:

Plan Estratégico 2022 - 2027

Por una Bolivia democrática, equitativa e intercultural.

  • Organizaciones indígena originaria campesinas democráticas, autogestionarias e interculturales con ejercicio efectivo de derechos Desafío 1 Organizaciones indígena originaria campesinas democráticas, autogestionarias e interculturales con ejercicio efectivo de derechos Leer más
  • Desarrollo rural sostenible con enfoque territorial y agroecológico Desafío 2 Desarrollo rural sostenible con enfoque territorial y agroecológico Leer más
  • Territorios Indígena originario Campesinos con gobernanza ambiental y resiliencia Desafío 3 Territorios Indígena originario Campesinos con gobernanza ambiental y resiliencia Leer más
  • Institución con capacidad de propuesta e incidencia sobre desarrollo sostenible Desafío 4 Institución con capacidad de propuesta e incidencia sobre desarrollo sostenible Leer más

Enlaces que te pueden interesar: